La cita era clara, a las 11 de la mañana partiría la marcha de las y los socios del Sindicato San Francisco de Asís hacia la Gobernación Regional de La Araucanía para terminar en el frontis del edificio de la Administración Central de La Fundación del Magisterio de La Araucanía. Sostenedor que se niega en avanzar en las justas demandas presentadas por sus trabajadores en plena negociación colectiva: «El sostenedor dice que no tiene plata a pesar de que éste recibe por concepto de subvención cerca de 55 mil millones de pesos anuales. Su respuesta ha sido déspota, humillante e insensible; durante todo el mes de agosto y parte de septiembre, no pudimos avanzar en nuestras propuestas, llegando incluso a tener 5 días de mediación con la Inspección del Trabajo, proceso que se terminó el 15 de septiembre pues el empleador se negó a seguir negociando», afirmó Gladys Leal presidenta del Sindicato.
«Lo que nosotros exigimos son cuestiones básicas, como tener un protocolo con respecto al agobio laboral, pago de horas de reemplazos de profesores que están con licencia o con permisos producto del mismo agobio, bono para las Asistentes de la Educación, bono de locomoción, entre otras demandas. Es importante recordar que nuestra labor es de gran compromiso pedagógico, social y humano pues la mayoría de nuestros estudiantes pertenecen a la etnia Mapuche y residentes de sectores rurales vulnerables de las regiones de La Araucanía y de Los Ríos, sin embargo este es el trato que nuestro sostenedor nos da», cerró la dirigenta sindical.
En ese mismo tenor, el profesor Omar Pedreros, dedicado hace 35 años a hacer clases de Lenguaje y Comunicación, relata porqué votó a favor de la huelga: «Nosotros ya estamos prácticamente asumiendo los problemas de la sociedad y de las familias en las salas de clases y por eso es importante que el sostenedor asuma los cambios que ha tenido el ejercicio de ser profesor y que necesitamos con urgencia un protocolo de protección para los docentes. El abordaje de la convivencia escolar es una de nuestras demandas, ante la cual la Fundación no puede quedar ajena», cerró Pedreros.
